Si se acompaña de avulsión del tendón del bíceps crural, que se inserta en la cabeza del peroné, puede afectar al nervio ciático poplíteo externo y provocar el síndrome de Harry Platt. El ligamento lateral externo se origina en el epicóndilo femoral externo y se inserta en la cabeza del peroné. Queda tenso en extensión, pero se relaja a medida que se flexiona la rodilla.