H. pylori se encuentra en el 85 al 100% de los pacientes con úlcera duodenal, así como
en el 70 al 90% de los que presentan úlceras gástricas. La recurrencia de estos dos
tipos de úlcera disminuye significativamente tras la erradicación de la bacteria con el
tratamiento adecuado.
El hábitat natural de H.Pylori es la mucosa gástrica dondequiera que ésta se encuentre,
ya sea en el estómago o en la metaplasia gástrica del esófago o duodeno. La
predilección que tiene la bacteria por las uniones intercelulares puede favorecer la
difusión de iones de hidrógeno al interior de la mucosa. También se piensa que tiene
toxinas capaces de ocasionar la inflamación de la mucosa. La prevalencia de infección
por H. pylori en pacientes que toman AINEs (antiinflamatorios no esteroideos) oscila entre
el 22 y el 63%. No obstante, las úlceras por AINEs se forman por un mecanismo distinto al
que provoca su formación en pacientes infectados, pero es posible que su efecto sea
aditivo.